Seguramente a mucha gente le guste el queso roquefort. Y cómo sabreis existen mil y una maneras de disfrutarlo. Y yo os presento una de ellas. Es una salsa para ensaladas, ya que al no ser demasiado espesa, y al ser ligerita, no queda demasiado bien con carnes. Es muy fácil, y para aquellos a los que les cueste comer verduras crudas sólo con vinagre y aceite, puede resultar una opción muy apetitosa.
Ingredientes:
1-Un cartoncillo de nata para cocinar.
2-Un trozo de queso roquefort (más o menos según el gusto)
3-Un poco de leche
Preparación:
Lo único que teneis que hacer es poner en una ollita la nata, el trozo de queso y un chorro de leche. Todo depende de si os gusta más ligera o menos. Es decir, con un sabor más o menos intenso. Eso dependerá de la cantidad de queso que echeis y la cantidad de leche. Claro está, ¡con sendidiño!
Bueno, y un ejemplo de ensalada a la que le puede quedar muy bien es la siguiente:
1-Tronquitos de cangrejo, en abundancia o si preferis de carne, ternera en cachitos o pollo frito.
2-Lechuga, no demasiada.
3-Una latita de maicitos.
4-piña cortada o si lo preferis, media manzanita.
5-Pan tostado, o biscotes cortados en cachitos. Ésto le queda muy bien, porque absorve la salsa y se saborea más intensamente. Un pan que está muy bueno, es el de ajo. le queda muy bien.
-Lo cortais todo, lo verteis en un bol, y cuando la salsa enfríe se la echais por encima y removeis.
-¡Y listo! ¡A comer!
Espero que la disfruteis.
Pertenece a la seccion Cocina